J´adore l´indécis, les sons, les couleurs frêles,
Tout ce qui tremble, ondule, et frissonne, et chatoie:
Les cheveux et les yeux, l´eau, les feuilles, la soie,
Et la spiritualité des formes grêles;
Les rimes se frôlant comme des tourterelles,
La fumée où le songe en spirales tournoie,
La chambre au crépuscule, où son profil se noie,
Et la caresse de ses mains surnaturelles;
L´heure de ciel au long des lèvres câlinée,
L´âme comme d´un poids de délice inclinée,
L´âme qui meurt ainsi qu´une rose fanée,
Et tel coeur d´ombre chaste, embaumé de mystère,
Où veille, comme le rubís d´un lampadaire,
Nuit et jour, un amour mystique et solitaire.
Au jardin de l´infante, 1893
Dilección
Me encanta lo indeciso, los sonidos, los colores frágiles,
Todo lo que tiembla, ondula, y escalofría, y cosquillea
El cabello y los ojos, el agua, las hojas, la seda,
Y la espiritualidad de las formas finas;
Las rimas rozándose como tórtolas,
El humo en el que el ensueño en espirales revolotea
La habitación al crepúsculo, en la que su perfil se anega,
Y la caricia de sus manos sobrenaturales;
La celeste hora mimosa sobre unos labios,
El alma como inclinada por un delicioso peso,
El alma moribunda como una rosa mustia,
Y este corazón casto de sombras, embalsamado de misterio
En donde vela como el rubí de un candelero
Noche y día , un amor místico y solitario
La hora del cielo
En el jardín de la infanta, 1893
Deja una respuesta